Sin cambio no hay vida
Para cambiar el mundo empecemos por cambiar nosotros, a ver, si el mundo es un plato (delicioso o desastroso) seamos conscientes que nosotros somos la materia prima, uno de los ingredientes principales, mejoremos nosotros y poco a poco veremos cambios fuera. Cambiar no es nada negativo, de hecho, no hay nada que no cambie, sin cambio no hay vida. Cambia, mejora, crece
No hay comentarios :
Publicar un comentario